Coaliciones Tarsales. ¿Qué son?, Síntomas y Diagnóstico.
Artículo escrito y verificado por el podólogo Dr. Iborra.
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¿Qué son las Coaliciones Tarsales?.
La coalición tarsal es una falta de separación o unión anormal de alguno de los huesos que forman parte del retropié (astrágalo, calcáneo, escafoides o cuboides).
Frecuentemente son infradiagnosticados y en la adolescencia pueden ser dolorosos y en la edad adulta predisponer a la artrosis precoz.
Origen o Causa de las Coaliciones Tarsales.
La causa de la coalición tarsal puede ser congénita o aquirida.
– Las coaliciones tarsales congénitas son las más frecuentes y se deben a un fallo en la diferenciación embrionaria, es decir, durante el proceso de gestación.
Dentro de estas, las más frecuentes son las coaliciones talo-calcáneas (entre el hueso astrágalo y calcáneo) y las calcáneo- naviculares (entre el hueso calcáneo y el escafoides o navicular). El 50-80% son bilaterales, más frecuentes en varones.
– Las coaliciones tarsales adquiridas son secundarias a traumas, infecciones, procesos neoplásicos, enfermedades autoinmune reumáticas, siendo poco frecuentes.
Clasificación de las Coaliciones Tarsales.
Las coaliciones tarsales se clasifican atendiendo a dos criterios; según el tejido de unión de la coalición tarsal y según la localización.
Respecto al tejido de la unión de la coalición
- Cartilaginosa: tejido de unión cartílago
- Fibrosa: tejido de unión fibrótico
- Ósea: Tejido de unión ósea
Respecto a la localización
- Calcáneo-navicular: Presentación del dolor entre los 8-12 años.
- Talo-calcánea: Presentación del dolor entre los 12-16 años.
- Talo-navicular: Presentación clínica 6 años.
El resto de las coaliciones tarsales son menos frecuentes.
¿Se curan las Coaliciones Tarsales?.
Si, la coalición tarsal se puede curar mediante cirugía, pero en un porcentaje muy alto, con el uso de plantillas u ortesis plantar personalizadas se evita la cirugía.
El tipo de cirugía dependerá del tipo de coalición y si existe artrosis asociada o no, pudiendo realizar una separación de los huesos o resección de la coalición
En ocasiones, hay que realizar la fijación o fusión absoluta de ambos huesos, a lo que se denomina artrodesis.
Coaliciones Tarsales Diagnóstico.
La exploración física será imprescindible para el diagnóstico de la coalición tarsal, analizando la movilidad articular tanto en descarga como en carga, estudiando posibles alteraciones articulares: oseas, ligamentosas y tendinosas. En la exploración manual, en el caso de coalición tarsal, lo primero que se observará será una perdida de movilidad o rigidez articular.
Alguno de los test específicos que se harán son:
- Tes de Jack
- Test de Hubscher
- Test de Coleman (reverso)
pero, para confirmar el diagnóstico, se necesitará la resonancia magnética y/o escáner.
La radiografía simple en 3 proyecciones, siendo la dorsoplantar, lateral y oblicua, se pueden diagnosticar un gran porcentaje de las coaliciones calcáneo-naviculares y talo-calcáneas.
Una imagen radiológica muy característica en las coaliciones calcáneo-naviculares es el signo de “nariz de oso hormiguero”.
Imagen de RX y resonancia magnética de coalición calcáneo-navicular fibrosa (niño de 11 años).
TAC en 3 D. coalición astrágalo-calcánea.
En ocasiones se requiere de resonancia magnética o TAC, para diferenciar si la coalición es fibrosa, ósea o cartilaginosa.
Estas pruebas de imagen ayudarán al cirujano en la planificación quirúrgica.
Síntomas de la Coalición Tarsal.
Los síntomas principales de la coalición tarsal son:
– la rigidez articular, que limita al pie en su adaptación al terreno.
– el dolor al caminar, principalmente por terreno irregular o estar de pie estático y con el reposo el dolor mejora.
La alteración biomecánica y mal formación estructural provoca dolor agudo y difuso de características exclusivamente mecánicas, es decir el dolor aumenta con la actividad y mejora con el reposo.
– Otro síntoma frecuente que refiere el paciente es que describe cansancio en los pies.
VÍDEO: BIORÉPLICAS Y COALICIONES TARSALES
